'Existe una manera de vivir a la que los Lakota llaman "Caminar en la Belleza." Se dice que uno Camina en la Belleza cuando tiene su Tierra (parte física) y su Cielo (parte espiritual) en Armonía.'
miércoles, 13 de julio de 2011
Cuento de los Nativos Americanos:
Los abuelos transmiten en cuentos la realidad a sus nietos, como en todas las culturas:
Un anciano de una tribu estaba teniendo una charla acerca de la vida con sus nietos.
Les dijo: Una gran pelea está ocurriendo en mi interior y es entre dos lobos. Uno de los lobos representa la maldad, el temor, la ira, la envidia, el dolor, el rencor, la avaricia, la arrogancia, la culpa, el resentimiento, la inferioridad, la mentira, el orgullo, la competencia, la superioridad y la egolatría. El otro la bondad, la alegría, la paz, el amor, la esperanza, la serenidad, la humildad, la dulzura, la generosidad, la benevolencia, la amistad, la empatía, la verdad, la compasión y la fe.
Esta misma pelea está ocurriendo dentro de ustedes, y dentro de todos los seres de la tierra.
Lo pensaron por un minuto y uno de los niños le preguntó a su abuelo:
Abuelo, dime… ¿Cuál de los lobos ganará?".
Y el anciano Sioux respondió simplemente... EL QUE TÚ ALIMENTES !!!
Que buena comparación entre la maldad y la bondad que existe en cada persona debriamos darnos cuanta que nuestras actitudes y pensamientos no hacen cada vez más sencibles o lo contrario, las tribus americanas tienen un pensamiento tan tenas de ver la vida, es tan apasionante su concepción de lo que les rodea y como lo interpretan.
La concepción que tienen los nativos americanos de lo que les rodea y la interpretación que hacen del sentido de la vida son tan certeras y conmovedoras porque las acunan en el corazón, conforme a las improntas de belleza y perfección que la Naturaleza Universal ha propuesto como elección dentro de la propia naturaleza de los hombres. Los nativos americanos son seres libres en un mundo libre, que se sustenta en el respeto al medio que nos ha dado la vida y a todos los compañeros de viaje, sin excepción. El resto de la Humanidad ha perdido los vínculos con su origen y elude su verdadera misión, buscando una ascendencia alternativa fuera de lo real, para poder someter con brutalidad la existencia y todo cuanto en ella vive; en lugar de dedicar las facultades que se le han dado para procurar alcanzar la sabiduría y, a través de élla, el equilibrio con todas las cosas. Ese es el objeto de nuestra existencia. El Universo nos ha creado como consciencia física de sí mismo y la consciencia no tiene otro fin que garantizar la protección y el equilibrio del mundo que nos rodea y de cuantos en él viven. Lo contrario significa la destrucción de ese mundo y la nuestra con él.
Lo más relevante de este cuento -y asimismo de todos los cuentos que se enuncian en las civilizaciones periféricas, existentes como restos del mundo antigüo-, no es sólo su magistral comparación entre lo bueno y lo malo, su verdadera transcendencia consiste en el respeto a la libertad del individuo, porque al niño no se le inculcan ideas preconcebidas que le coarten en su criterio. Se le dan opciones y, con ellas, probabilidades de ser y hacer, que es lo que realmente define la identidad humana.
Nada es más civilizado que la proposición a los niños de la libre elección acerca de la forma en que prefieran vivir, cuando aún tienen la mente limpia; porque, cuando hayan elegido, se sentirán verdaderamente comprometidos con su elección, forjarán su carácter conforme a ella y se convertirán en hombres libres dueños de su destino.
Contrariamente, en esa otra sociedad nuestra, condicionan nuestra personalidad precisamente cuando somos niños y nos diseñan para fines interesadamente determinados, sin opción alguna y sin la menor capacidad de elegir. Más nos valdría que, en nuestros colegios y universidades, los profesores de currículum fueran sustituídos por "salvajes" Sioux, como este abuelo; porque sería la única manera de que tuviésemos una oportunidad de ser realmente humanos y procurar un mundo mejor, en el que todas las personas y todos los animales tengan derecho a vivir con dignidad y respeto.
Mucha gente quiere pensar que eso sería retroceder en nuestros inestimables avances; pero de qué avances nos hablan, de la brutalidad y el sufrimiento, de la miseria y el hambre, del miedo y la cobardía, de la esclavitud y el expolio del hombre. A lo único que hemos llegado es a un mundo sin esperanza y, además, hemos borrado intencionadamente y para siempre las huellas del camino de regreso.
Me encanto este cuento. No cabe duda que la sabiduría de las tribus indígenas tienen muchísima magia. Soy de México y en ocasiones me da mucha tristeza que no valoren las raíces de donde venimos.
soy del AMAZONAS VENEZUELA indigena de sangre, nuestra cultura tiene conocimientos de una sabiduria milenaria y a traves de los tiempos se transforma en un poder celestial el cual le es facil de comprender la existencia de las cosas.
Que buena comparación entre la maldad y la bondad que existe en cada persona debriamos darnos cuanta que nuestras actitudes y pensamientos no hacen cada vez más sencibles o lo contrario, las tribus americanas tienen un pensamiento tan tenas de ver la vida, es tan apasionante su concepción de lo que les rodea y como lo interpretan.
ResponderEliminarLa concepción que tienen los nativos americanos de lo que les rodea y la interpretación que hacen del sentido de la vida son tan certeras y conmovedoras porque las acunan en el corazón, conforme a las improntas de belleza y perfección que la Naturaleza Universal ha propuesto como elección dentro de la propia naturaleza de los hombres.
EliminarLos nativos americanos son seres libres en un mundo libre, que se sustenta en el respeto al medio que nos ha dado la vida y a todos los compañeros de viaje, sin excepción.
El resto de la Humanidad ha perdido los vínculos con su origen y elude su verdadera misión, buscando una ascendencia alternativa fuera de lo real, para poder someter con brutalidad la existencia y todo cuanto en ella vive; en lugar de dedicar las facultades que se le han dado para procurar alcanzar la sabiduría y, a través de élla, el equilibrio con todas las cosas.
Ese es el objeto de nuestra existencia. El Universo nos ha creado como consciencia física de sí mismo y la consciencia no tiene otro fin que garantizar la protección y el equilibrio del mundo que nos rodea y de cuantos en él viven.
Lo contrario significa la destrucción de ese mundo y la nuestra con él.
Ahoo hno!
EliminarLo más relevante de este cuento -y asimismo de todos los cuentos que se enuncian en las civilizaciones periféricas, existentes como restos del mundo antigüo-, no es sólo su magistral comparación entre lo bueno y lo malo, su verdadera transcendencia consiste en el respeto a la libertad del individuo, porque al niño no se le inculcan ideas preconcebidas que le coarten en su criterio. Se le dan opciones y, con ellas, probabilidades de ser y hacer, que es lo que realmente define la identidad humana.
ResponderEliminarNada es más civilizado que la proposición a los niños de la libre elección acerca de la forma en que prefieran vivir, cuando aún tienen la mente limpia; porque, cuando hayan elegido, se sentirán verdaderamente comprometidos con su elección, forjarán su carácter conforme a ella y se convertirán en hombres libres dueños de su destino.
Contrariamente, en esa otra sociedad nuestra, condicionan nuestra personalidad precisamente cuando somos niños y nos diseñan para fines interesadamente determinados, sin opción alguna y sin la menor capacidad de elegir.
Más nos valdría que, en nuestros colegios y universidades, los profesores de currículum fueran sustituídos por "salvajes" Sioux, como este abuelo; porque sería la única manera de que tuviésemos una oportunidad de ser realmente humanos y procurar un mundo mejor, en el que todas las personas y todos los animales tengan derecho a vivir con dignidad y respeto.
Mucha gente quiere pensar que eso sería retroceder en nuestros inestimables avances; pero de qué avances nos hablan, de la brutalidad y el sufrimiento, de la miseria y el hambre, del miedo y la cobardía, de la esclavitud y el expolio del hombre. A lo único que hemos llegado es a un mundo sin esperanza y, además, hemos borrado intencionadamente y para siempre las huellas del camino de regreso.
Carlos, me ha emocionado mucho tu comentario, Gràcias por aportar tus sentimientos y compartirlo con nosotros.
ResponderEliminarSabias palabras amigo.
Dakota1
Me encanto este cuento. No cabe duda que la sabiduría de las tribus indígenas tienen muchísima magia. Soy de México y en ocasiones me da mucha tristeza que no valoren las raíces de donde venimos.
ResponderEliminarEstamos contigo Berenice, espero que disfrutes visitando este blog, y te ayude a conectarte un poco más con tus raices....
ResponderEliminarsoy del AMAZONAS VENEZUELA indigena de sangre, nuestra cultura tiene conocimientos de una sabiduria milenaria y a traves de los tiempos se transforma en un poder celestial el cual le es facil de comprender la existencia de las cosas.
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